Un Mundo Interior - Insideworld: June 2014

LA LIBERTAD EN LA EPOCA DE LA REFORMA

La sociedad medieval y el Renacimiento
Lo que caracteriza a la sociedad medieval, en contraste con la moderna, es la ausencia de libertad individual. Todos se hallan encadenados a una determinada función dentro del orden social (un hombre tenia pocas probabilidades de trasladarse socialmente de una clase a otra). El orden social era concebido como un orden natural, y el ser una parte definida del mismo proporcionaba al hombre un sentimiento de seguridad y pertenencia.

La sociedad medieval no despojaba al individuo de su libertad, porque el "individuo" no existía todavía; el hombre estaba aún conectado con el mundo por medio de sus vínculos primarios, y no se concebía a sí mismo como individuo. No se había desarrollado todavía la conciencia del propio yo individual, del yo ajeno y del mundo como entidades separadas. "El hombre era consciente de sí mismo tan solo como miembro de una raza, pueblo, partido, familia o corporación; tan solo a traves de alguna categoría general" (Jacob Burckhardt).

La estructura de la sociedad y la personalidad del hombre cambiaron en el periodo posterior de la Edad Media. La unidad y la centralización de la sociedad medieval se fueron debilitando. Hay que tener en cuenta que todo este proceso no tenía el mismo significado para el pequeño grupo de los capitalistas ricos que para las masas campesinas o para la clase media urbana.

Así, las masas que no participaban del poder y la riqueza del grupo gobernante perdieron la seguridad que les otorgaba su estado anterior, volviéndose un conjunto informe siempre víctimas de las manipulaciones y la explotación de los detentadores del poder; al lado del nuevo individualismo surgió un nuevo despotismo. Estaban así entrelazadas la libertad y la tiranía, la individualidad y el desorden.

El Renacimiento no fue una cultura de pequeños comerciantes y

de pequeños burgueses, sino de ricos, nobles o ciudadanos. Su actividad económica y su riqueza les proporcionaban un sentimiento de libertad y un sentimiento de individualidad. Pero a la vez esta misma gente había perdió algo: la seguridad y el sentimiento de pertenencia que ofrecía la estructura social medieval. Eran mas libres, pero a la vez se hallaban mas solos.

En la sociedad medieval la organización económica de la ciudad fue relativamente estática. Las corporaciones se hallaban basadas en la cooperación mutua y ofrecían una relativa seguridad a sus miembros.

El sistema social medieval quedo destruido y con él la estabilidad y la relativa seguridad que ofrecía al individuo. Con los comienzos del capitalismo todas las clases empezaron a moverse. Dejó de haber un lugar fijo en el orden económico que pudiera ser considerado como natural, como incuestionable. El individuo fue dejado solo; todo dependía de su propio esfuerzo y no de la seguridad de su posición tradicional.

El papel creciente del capital, del mercado y de la competencia condujo la situación personal de los individuos hacia la inseguridad, el aislamiento y la angustia. Pero hay que tener en cuenta que también fue el capitalismo el que liberó al individuo de la regimentación del sistema corporativo. El individuo se convirtió en dueño de su destino: suyo sería el riesgo pero suyo también sería el beneficio, y el esfuerzo individual podía conducirlo al éxito y a la independencia económica.

THE FREEDOM IN THE EPOCH OF THE REFORM

The medieval society and the Renaissance

What characterizes the medieval society, in contrast with the modern one, is the absence of individual freedom. They all are chained to a certain function inside the social order (a man had little probabilities of moving socially from one class to other one). The social order was conceived like a natural order, and the being a definite part of the same one was providing to the man a safety feeling and belonging.

The medieval society was not depriving the individual of its freedom, because the "individual" did not exist yet; the man was still connected by the world by means of its primary ties, and was not conceived himself as individually. Individual I had not developed yet the conscience of the proper one, of foreign me and of the world like separated entities. "The man realized himself only like member of a race, people, party, family or corporation; only across some general category" (Jacob Burckhardt).

The structure of the society and the personality of the man changed in the later period of the Middle Age. The unit and the centralization of the medieval society were weakening. It is necessary to bear in mind that all this process did not have the same meaning for the small group of the rich capitalists than for the rural masses or for the urban middle class.

This way, the masses that were not taking part of the power and the wealth of the ruling group lost the safety that its previous state was granting them, turning a set always report victims of the manipulations and the development of the detainers of the power; next to the new individualism a new despotism arose. There were this way interlaced the freedom and the tyranny, the individuality and the disorder.

The Renaissance was not a culture of small merchants and of small bourgeoises, but of rich, noble or civil. Its economic activity and its wealth were providing to them a feeling of freedom and an individuality feeling. But simultaneously the same people there was it lost something: the safety and the feeling of belonging that was offering the medieval social structure. They were freer, but simultaneously they were more alone.

In the medieval society the economic organization of the city was relatively static. The corporations were based on the mutual cooperation and were offering a relative safety to its members.

The medieval social system remained destroyed and with him the stability and the relative safety that was offering the individual. With the beginning of the capitalism all the classes began moving. There stopped being a fixed place in the economic order that could be considered to be a native, as unquestionably. The individual was left alone; everything was depending on its own effort and not on the safety of its traditional position.

The increasing role of the capital, of the market and of the competition led the personal situation of the individuals towards the insecurity, the isolation and the anxiety. But it is necessary to bear in mind that also it was the capitalism the one that liberated the individual of the regimentation of the corporate system. The individual turned into proprietor of its destination: his would be the risk but his also would be the benefit, and the individual effort could lead it to the success and to the economic independence.